No es ningún nuevo descubrimiento que somos lo que comemos. Pero… ¿De dónde viene esta frase? Este famoso dicho proviene del año 1980, cuando un filósofo y antropólogo alemán llamado Ludwig Feuerbach, hizo un escrito llamado “Enseñanza de la alimentación”, donde criticaba la clásica visión de la iglesia donde el hombre sólo necesita pan y agua. Una de las frases más famosas decía: «Si se quiere mejorar al pueblo, en vez de discursos contra los pecados denle mejores alimentos. El hombre es lo que come».
Y es que cuando decimos que “somos lo que comemos”, no podemos tener más razón. Sabemos que una alimentación sana nos ayuda a sentirnos más enérgicos y fuertes y a eliminar ciertas molestias. Sí, es cierto es que la dieta es muy importante a la hora de prevenir o provocar una enfermedad. Es cierto que sólo es un factor más (la susceptibilidad genética, los agentes contaminantes, los microorganismos…) todos tienen una importancia vital, pero la diferencia está en que el resto de los factores no podemos controlarlos, sin embargo… sí la alimentación.
Por eso, recomendamos tener una dieta variada y bien planificada, donde tengas de todo y no te falte de nada y podrás beneficiarte de un largo listado de beneficios, para lograr una garantía de salud a largo plazo.
No lo dudes más, hoy puede ser un buen día para empezar a cuidarte 😉